"La mocedad tiene mucho paro, por eso hay que votar el domingo." Y no lo digo yo, nos lo decía el otro día una señora mayor en el salón de su casa, adonde habíamos ido a entregar el programa y las papeletas electorales y en donde nos invitó a entrar. Nos recibió, no para mostrarnos su hospitalidad, sino para darnos sus argumentos, para cargarnos de más razones. Hay que votar, decía.
Para qué, nos espetan otras personas, para las que todos somos iguales, que se reconocen desengañadas, que echan pestes de la política, entendida ésta como lo que hacen "los políticos", no la ciudadanía. Para qué es una buena pregunta cuando hay disposición a escuchar otras preguntas y las respuestas.
Para qué, nos espetan otras personas, para las que todos somos iguales, que se reconocen desengañadas, que echan pestes de la política, entendida ésta como lo que hacen "los políticos", no la ciudadanía. Para qué es una buena pregunta cuando hay disposición a escuchar otras preguntas y las respuestas.
Ayer, durante el reparto casa por casa, fue un joven el que con amabilidad nos explicó que recogía el programa para informarse, pero no las papeletas: yo también estoy indignado. Y yo, le dije. Pero tú votas y pides el voto, se extrañó. Por eso: estoy indignado y actúo, modestamente actúo, con dudas y sin complejos actúo. Como tú. El joven estaba al tanto –antes por facebook que por televisión– de los movimientos sociales de quienes muestran su indignación como primera forma de resistencia.
El tema da para una reflexión más profunda. Algo no hemos hecho bien cuando la participación social se enfrenta a la política democrática (reconocerlo no es hacer guiños oportunistas a nadie, ni siquiera a este joven de Zafra). La política se hace aquí y ahora: si el aquí y el ahora fueran otros, igual estaríamos juntos en la Puerta del Sol. Pero sigo convencido de que el domingo iría a votar.
Y no nos olvidamos, señora, de que la mocedad tiene mucho paro.
Es que esta política no es democrática, José
ResponderEliminarLúcido, lúcido, lúcido
ResponderEliminarTengo una duda, la mocedad parada ¿a qué clase pertenece?, algunas y algunos no han tenido posibilidad todavía de sentirse clase trabajadora.
ResponderEliminarLos tiempos exigen cambios, en las teorías y en las prácticas políticas.
Yo estaría en Sol si pudiera, y por supuesto votaré el domingo.
Yo también estoy con Sol y votaré el domingo.
ResponderEliminarY yo también me declaro indignado, estoy con Sol (o con la Plaza del Palillero, en Cádiz, que me pilla más cerca) y votaré el domingo.
ResponderEliminarPero no dejo de entender a quienes, en su indignación optan por la abstención y declaran su repugnacia por la política partidista.
Creo que, si entre tod+s l+s indignad+s conseguimos cambiar la forma de hacer política y avanzamos hacia una democracia participativa, transparente, honesta... cada vez más gente recuperará la confianza en la política y querrá participar, con el voto y en la calle cada día.
Me alegro mucho de que esté ocurriendo todo esto porque, de otra forma, posiblemente no estaríamos hablando de estas cosas.
Un abrazote
No se podía esperar menos de algunos de vosotros. Oh, por supuesto que estoy con Sol. En misa y repicando. La nueva izquierda aquella... Deberías iros a vuestra casa
ResponderEliminarLos viejos sueñan sueños y los jovenes ven visiones. Es normal.
ResponderEliminarFelicidades por saber encajar una derrota severa. Adelante!!!
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