Cambiar para resistir. Creamos los dichos, refranes si acaban siendo de uso común. Lemas o frases hechas que no siempre significan lo que parece. Rechazo algunos por lo que quieren decir: maldito el árbol que no te deja ver el bosque. Y otros por lo que se atrevían a afirmar: la mujer en casa, con la pata quebrá. Los había incomprensibles, como que la ocasión la pintaran calva. Desconfío, a menudo porque aseguran una cosa y la contraria. Ni por mucho madrugar amanece más temprano ni a quien madruga Dios le ayuda. O depende. Conozco a alguien que los trabuca: más vale pájaro en mano que lo bueno por conocer. O que los inventa para enfatizar cualquier ocurrencia. Como dice el refrán, esto es lo que hay. Ni siquiera son infalibles los rurales. No sé si marzo ventoso y abril lluvioso hacen a mayo florido y hermoso ni si cuando marzo mayea, mayo marcea. La cultura popular sentenciaba en tiempos de menor incertidumbre. Llegaba un punto conservador en el que bastaba con amagar. A quien buen árbol se arrima…, genio y figura…, se cree el ladrón… Y tú, ¿de quién eres? Ahora los versionamos: a cliente que huye, puente de plata. O lanzamos chascarrillos propios, quizás de corto alcance pero sentido hondo. Como ese cambiar para resistir. O el fundirse para refundarse, también atribuido a nuestras organizaciones. Cuidado con los dichos. Si te preguntan qué es peor, ¿la ignorancia o la indiferencia?, no respondas ¡ni lo sé ni me importa!
[Dichos]
[Dichos]
Te falta aquél que decía: "Niño refranero, niño puñetero".
ResponderEliminarUn besote gordo (el besote)
fui puñetero, pero poco refranero..., me gustan algunos dichos locales: "si detrás del Castellar está oscuro, llueve seguro" o el mítico "tiene más arestín que el gato del ambulatorio", aunque prefiero los que vamos acuñando juntos, esos "cambiar para resistir" o "fundirse para refundarse" con los que declaramos principios y que nunca llegarán al refranero :)
ResponderEliminarBueno, del dicho al hecho hay mucho trecho.
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