11/12/11

El arte de decir no

Aceptó. "¿Por qué lo hago?, preguntó retóricamente. Porque uno se cansa de decir no, y un día podría tener ganas de decir sí sin que nadie me propusiera nada." Aceptar por si no llegara otra propuesta. Es lo que hizo Raymond Chandler cuando Hitchcock le ofreció en 1951 volver a Hollywood para colaborar en el guión de "Extraños en un tren". Inesperadamente, Chandler aceptó. El escritor de novela negra acabará despidiéndose de todo y para siempre, tras llamar "panzudo bastardo" al afamado maestro del cine de suspense. ¿Por qué aceptaría Chandler regresar a Los Ángeles, a la meca de su perdición literaria y personal? Cuentan que lo hizo para perseguir a las secretarias y beberse el alcohol que había dejado sin consumir en su anterior desventura en Hollywood. Pero de allí había huido cinco años atrás, harto "de no hablar con un hombre culto durante meses". Y aceptó volver, no para encontrar algo nuevo o retomar algo viejo, sino por el puro cansancio de decir no y el temor a no tener nada más a lo que decir sí. Chandler tampoco fue asertivo. Como tantos y tan a menudo, no supo o no quiso poner en práctica el arte de decir no.


3 comentarios:

  1. Recordé el cuento del escritor americano Herman Melville (el autor de Moby Dick) en el que un oficinista contesta a todas las solicitudes de su empleador para realizar un trabajo: “Preferiría no hacerlo.” La frase la reproduce Enrique Vila-Matas en una novela breve titulada Bartleby y compañía.

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  2. An, bien traida esta cita sobre V-M sacada de un blog de Asertividad ;-)

    no daba la pista por ese libro suyo, sino por otro, "El viajero más lento. El arte de no terminar nada", y el episodio de Chandler es uno de los que narra él, referido a lo cinematográfico

    (hay líneas que se re-leen en el momento más adecuado)

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  3. A veces el miedo al olvido,al rechazo,a las represalias,nos obliga a hacer cosas por miedo a ofrecer una negativa (Que a veces es el paso mas correcto).Aunque la verdad,normalmente cuando digo no,me suelo arrepentir,asi es que prefiero arriesgarme y sonreir a la vida con un SI. Un abrazo Jose

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