27/11/11

El acumulador

Acumular, acumular, acumular. Son acumuladoras las personas que sufren el trastorno de acumular objetos sin poder deshacerse de ellos. Guardan apego a cosas que carecen del valor que incomprensiblemente les otorgan. En Estados Unidos son conocidas como hoarders y hasta cuentan con una serie dedicada a ellos. Los desechos son televisivos. El desorden patológico de acumular cosas inútiles es conocido como síndrome Collyer, el nombre de dos hermanos hallados muertos en Nueva York en 1947, en medio (y debajo) de 103 toneladas de objetos inútiles: llegaron a amontonar catorce pianos en casa, sin que se sepa que hubieran tocado en su vida una sola nota. Los acumuladores no tienen por qué padecer el síndrome de Diógenes. Éste consiste en aislarse de la sociedad y rodearse de grandes cantidades de desperdicios domésticos o, lo que puede ser lo mismo, de dinero. Es curioso, el filósofo griego Diógenes llevaba hasta el extremo justamente lo contrario: la privación de cualquier bien material. El acumulador de hoy no almacena basura ni es coleccionista (coleccionar implica organizar en orden lo que se busca y se guarda). La persona que acumula da un valor sentimental o económico a algo que para los demás no lo tiene. En muchos casos, se limita a acumular objetos para recuperar el tiempo perdido. O para frenar con el apego a lo tangible el paso irremediable del tiempo. Para crearse la vana ilusión de que el tiempo no pasa. De que el tiempo no ha pasado.

23/11/11

10 enseñanzas

Me han puesto sobre la pista de una entrada del blog No le digas a mi madre que trabajo en bolsa, en la que Francisco Álvarez Molina escribe sobre “una iniciativa que va de abajo a arriba (lo contrario del modelo económico vigente)”. Lo hemos relacionado con el Foro La participación social para el desarrollo (REDEX y Junta de Extremadura, Mérida, 9 de noviembre de 2011), en el que participamos.

El Foro pone en valor la experiencia de veinte años de programas de desarrollo rural en Extremadura con enfoque LEADER, o sea, ascendente, participativo, de abajo arriba: “La Red Extremeña de Desarrollo Rural (REDEX) y los 24 Grupos de Acción Local de Extremadura entienden la participación social como un instrumento imprescindible para el desarrollo, muestran las enseñanzas extraídas de los Grupos de Acción Local y REDEX desde 1991, y afrontan con sus experiencias los nuevos retos de futuro del medio rural en Extremadura”.

En la Declaración final del Foro hemos identificado esas “10 enseñanzas” que pueden extraerse de las experiencias de los Grupos de Acción Local: estrategias, identidades, cooperación, gobernanza, innovaciones, aprendizaje, emprendimiento, diversificación, igualdad y sostenibilidad.


● En Extremadura, un amplio consenso sobre las estrategias diseñadas y ejecutadas ha centrado el enfoque de las instituciones y de la población en el territorio.

● A la identidad territorial del medio rural extremeño se han incorporado: la autoestima por los recursos rurales, la dimensión comarcal del bienestar y una fuerte cultura de la convivencia.

● Con LEADER, aumentan la optimización de los medios y la eficacia en su funcionamiento, porque se establece una importante complicidad público-privada para aumentar los recursos y mejorar los servicios.

● La gobernanza se construye con los Grupos de Acción Local como un modelo de trabajo en red, en el que las organizaciones sociales y las ciudadanas y los ciudadanos interactúan con las administraciones públicas.

● La población y las comarcas extremeñas, donde han proliferado iniciativas y proyectos considerados singulares, han conformado un auténtico laboratorio de innovación social y territorial.

● Extremadura no ha dejado que los procesos de desarrollo comunitario dependieran del voluntarismo o la improvisación: de ahí la inversión realizada en el capital social de las comarcas y en los elementos intangibles de éstas.

● El sostenimiento de las inversiones, no tanto en proyectos como en personas y procesos, es un factor decisivo para que madure la cultura del emprendimiento como motor de desarrollo.

● La dinamización de la economía rural extremeña se ha facilitado a partir de la búsqueda participativa del valor endógeno y de la diversificación económica de escala.

● El enfoque ascendente promociona la igualdad efectiva de oportunidades entre hombres y mujeres y estrecha las relaciones intergeneracionales.

● La aplicación de la metodología LEADER ha contribuido de manera determinante a la sostenibilidad –social, ambiental y económica– del medio rural: los pueblos en Extremadura son “pueblos vivos”.

Como escribía el bloguero, es lo contrario del modelo económico vigente. Y se cierra la Declaración final del Foro con un propósito: “convertir estas 10 enseñanzas en aprendizajes colectivos...”. Sea.

21/11/11

De resaca

¿Qué hay después de una larga jornada electoral? Lo normal, una mala noche y un día de resaca sin alcohol. Cansa ser interventor o apoderada. Veinte horas en un colegio nublan sin remedio las cavilaciones del día siguiente. No venimos de un sábado de reflexión: la auténtica jornada de reflexión nunca se produce la víspera. Sobre todo si los resultados no acompañan. Como anoche. Tiempo habrá para los análisis, decimos. En la sede del partido, de vuelta con la paliza en el cuerpo y si no hay motivos para festejos democráticos, se comparten sensaciones. Satisfacción porque se intentó, espanto por lo que se perderá, perplejidad humilde y orgullosa, sin complejos. Primeras impresiones, como la de que mucha gente ha votado como quien acude al curandero. Con desesperación, sin coherencia ni razón, a ciegas. No encontraremos explicaciones, pero tampoco caben reproches. ¿Qué puede reprocharse a quien simplemente busca cura a sus males? Un compañero preguntaba retórico, ya de madrugada de lunes, ¿y ahora, qué? Ahora, que ellos vayan gobernando, mientras nosotras reflexionamos y hacemos política. Reflexionar, sí. Pero después de esta resaca sin alcohol.

16/11/11

Sin complejos

Estamos pasando de un decepcionado No nos representan a un peligroso Ni siquiera les votamos. Los mercados han empezado a colocar a primeros ministros en Europa: Papademos, Monti... (Berlusconi no era santo ni de mi devoción, pero había sido votado en las urnas: aunque quizás no representara a gran parte del pueblo italiano, al menos fue formalmente elegido por éste.) A quien diga que da lo mismo le niego la mayor. Las maneras democráticas están para ser guardadas, sólo así puede mantenerse o mejorar la participación en los asuntos públicos. El perfil de esos nuevos primeros ministros es el que tuvieron muchos gobiernos de Franco: tecnócratas, o sea, gente obligada a mirar por la cuenta de resultados y por nada más, pueblo incluido.

Tampoco muchos políticos andan sobrados de sensibilidad democrática, ni son muchos los que garantizan con sus políticas la igualdad o el bienestar de la mayoría, es cierto. Más y mejor democracia es, si no la solución, sí la única forma civilizada de llegar a ésta. ¿Hay otras vías? Según los mercados o quienes los representan, es posible tirar de gobiernos de tecnócratas. Otros saldrán que reclamen, en esa lógica perversa, regímenes presididos por generales. Y ya puestos, ¿por qué no de generales tecnócratas?, seguro que alguno encuentran.

El próximo presidente del gobierno español no será elegido a dedo, confiemos en que tampoco lo sea el hombre o la mujer que lo suceda y que, mal que bien, podamos seguir votando. No llegará a haber democracia participativa sin voto. El 20 de noviembre mucha gente lo haremos –en palabras de Ángel Calle anoche en Zafra– sin espanto: con humildad, pero con orgullo. ¿Con desencanto? Sin complejos.

13/11/11

Digan lo que digan

Atención, mucha atención. "Sabemos qué es lo que hay que hacer y lo vamos a hacer. Y por eso hacemos lo que hemos dicho que íbamos a hacer y por eso seguiremos haciendo aquello que nos toca hacer a pesar de que alguno no se crea que vamos a hacer lo que hemos dicho que íbamos a hacer." Quien así ha hablado en un mitin es un presidente autonómico, se supone que sobre el programa electoral de su partido, el Popular. No es tan raro oír intervenciones políticas cuya única coherencia es la gramatical. De hecho, es preocupantemente habitual la ocultación o ausencia de ideas (malas o buenas), de iniciativas o propuestas. Pero este discurso tiene un triple mérito. Primero, su especial enrevesamiento, que hace inevitable compararlo con el del alcalde rural de "Bienvenido, Mister Marshall", aunque con menos gracia. Segundo, parece que ha sido armado sin la ayuda de aquellas plantillas diseñadas para hacer interminables combinaciones de palabras vacías; si acaso ha metido la mano un asesor tan creativo como poco inspirado. Tercer mérito: la intención del discurso no ha sido hablar sin decir nada, sino haberlo hecho para decirlo todo. Digan lo que digan, está todo dicho. Sabrán qué es lo que hay que hacer..., la cuestión es que nadie más lo sabe. Quizás por eso alguno no nos lo creamos. Si aspiran a gobernar, nos deben una explicación.

6/11/11

¿Presidente?

Me dirigí a la salida del polideportivo en cuanto el orador principal dio por acabado el mitin. Me encontré atrapado entre la multitud que accedía a los pasillos. Me sentía sofocado, cubierto por una gabardina gris y mi cara envuelta hasta las cejas por una bufanda. Un viejo militante, con chapa y banderola, fijó desde lejos su mirada en mí. En el último tramo de escaleras consiguió situarse a mi altura y me dijo, casi al oído: "¿Presidente?". Antes de que pudiera responderle dos escoltas me habían sacado en volandas a la calle.

2/11/11

La Isla del Meridiano

Fue el astrólogo y astrónomo Ptolomeo quien determinó que el Meridiano Cero pasara por el llamado Fin del Mundo Antiguo: ese punto geográfico era el extremo occidental de la isla canaria de El Hierro. El Hierro se convirtió por ello en Isla del Meridiano, desde el siglo II hasta finales del XIX, cuando éste fue desplazado por el de Greenwich. La información de su web oficial no ha sido actualizada, por lo que todavía se puede leer: "A pesar de que ya han pasado más de 200 años desde la última erupción, El Hierro cuenta con la mayor densidad de volcanes de Canarias, con más de 500 conos a cielo abierto y otros 300 cubiertos por coladas más recientes. Aunque las cuevas y tubos volcánicos de la isla tienen que ser investigados exhaustivamente, ya se han podido catalogar unos 70...". En realidad son algunos años menos y algún volcán más, después de la erupción submarina que está provocando movimientos sísmicos y emisiones de gases y mantiene en vilo a las apenas 11.000 personas que habitan esta isla de menos de 300 km2. El Hierro, sin semáforos ni ascensores, es un lugar pequeño y hermoso, remoto y familiar, pacífico y diverso, que aspiraba a una sostenibilidad ahora también amenazada. Ya no es el ser humano, sino la Naturaleza la que hace de las suyas en la Isla del Meridiano.

[jfgras. El Hierro, La Frontera. 2005]